Blogia
Nevares

CELADA DE LOS MIERCOLES.

CELADA DE LOS MIERCOLES.

En ese fondo de flores donde estás

las espinas cavan en la memoria,

el mar es como un monstruo en reversa

donde se ven pequeñas y ridículas mis rodillas

dobladas sobre ti.

Parece que leyeran las olas un mensaje

¿quién lo puso allí?

Tal vez, un hortelano cansado de la tierra.

 

Se ha secado el pozo excelso de los ojos.

Se viven presunciones inexactas.

Acercamientos de fuegos y de alas,

mariposas metálicas salidas de un taller.

En las orejas, pasadas a cigarro,

quedaron pendientes no pocos sueños.

Ahora los traga el ruido del mediodía

como el de un aserradero.

 

Resulta que la llama del amor es transparente

y quien busca quemarse en ella, debe calcular muy bien.

El peligro de caer en los miércoles es más que evidente,

y el de no volver a ver la luz.

La tierra tiembla de pavor en los puertos.

Y hasta el cielo, tan alto, con su pudridero de águilas

tiene el mentón en retirada.

Te desvaneces en el fulgor de las flores.

 

Siento desfilar los escuadrones de tus pétalos

que se van a alisar otra cabellera.

Y el cucharón es algo mortalmente pegajoso,

con un fondo oscuro de sarro y de cocinas.

Toda la mañana colándose por el corazón de un pajarillo

que trina en su frágil mandolina.

Esfuerzo tan grande del mar por recordar su empuje.

Las caricias sólo alcanzan para formar los acantilados.

 

Y yo no puedo sacar los pies de este estribo

en que se me ha enredado el alma a la hora.

Me seduce sin corazón y sin tablas,

arrastrándome hacia el olvido y los orígenes.

 

 

Autor: Julián Rojas.

Derechos Reservados de Autor bajo responsabilidad del mismo.

 

 

1 comentario

Carmen Rosales Vera -

Una grata sorpresa encontrarme con tu blog y la del Círculo Melipal. Felicitaciones.